Por Mónica Ayaviri y Juana Condori Santos.
En la escuela varios niños son humillados por su apariencia física.
Franco, un estudiante de una unidad educativa de Potosí, fue víctima de bullying en su curso. Él fue agredido por sus compañeros a mediados de marzo del 2019; lo golpearon, lo patearon, se burlaron de su nombre y lo insultaron por ser de baja estatura. La directora y los profesores desconocen que estas situaciones ocurren con frecuencia, porque los niños no quieren denunciar.
En el colegio de Franco hay varias expresiones de bullying: los agresores ponen sobrenombres o apodos, a las y los estudiantes cumplidos los molestan por presentar sus cuadernos al día y también por ser gordos, flacos, morenos, blancos, bajos, altos, etc.
Franco tiene 13 años y es muy tímido; dice que sufrió bullying, porque es de baja estatura. Se sentía triste por lo que lo vivía a diario. A la única que le avisó fue a su hermana mayor y ella le contó a su amiga. Esta conocía a la hermana del agresor y decidió avisarle; a su vez, la hermana le contó a su mamá lo que estaba haciendo su hermano menor y la mamá lo reprendió. Así terminó el sufrimiento de Franco, quien nunca pensó en denunciar las agresiones.
La directora y una profesora de la unidad educativa de Franco afirmaron que en las gestiones 2018 y 2019 no recibieron denuncias de bullying, aunque también indicaron que están investigando un posible caso. Lo que ambas recomendaron es que entre compañeros incentiven la denuncia para evitar la violencia entre estudiantes. La Defensoría de la Niñez y Adolescencia informó que sí ha tenido denuncias de bullying en las unidades educativas.
La Convención sobre los Derechos del Niño, en su artículo 2, señala que las niñas y niños tienen derecho a vivir sin ser discriminados; el artículo 5 dice que la familia tiene la responsabilidad de ayudar al ejercicio de sus derechos y el artículo 19 establece que las autoridades deben protegerlos de los malos tratos, los abusos y la violencia.
Estudiantes del mismo curso y de casi la misma edad. El más pequeño sufre bullying por su baja estatura.
Muchas veces los niños agredidos por sus compañeros se esconden en aulas vacías.
El bullying puede llegar a violencia física: golpes, patadas y puñetes.
En la escuela varios niños son humillados por su apariencia física.
Un niño que sufre bullying pide un alto a la violencia en el colegio.