Por Araceli Belén Quispe Apaza - Niña ecoperiodista

El humo de la basura quemada molesta a los vecinos de Tarapacá C, en especial a María Choque; su tienda está al frente del lugar donde depositan la basura a diario en este barrio de la ciudad de El Alto.

Doña María no sabe quiénes son las personas que atizan sus desechos, pero se queja porque daña su salud y la de su familia. “No puedo evitarlo, no veo en la noche y lo queman, de repente ya está humeando”.

La basura que se acumula se encuentra en un terreno destinado para un hospital, frente al coliseo de esta zona del Distrito 8, pero los vecinos convirtieron el lugar en un botadero a pesar de que el carro basurero pasa dos veces a la semana, los días jueves y sábado a las 8.30 de la mañana.

Doña Yolanda Arteaga, la esposa del presidente de la junta de vecinos, dice que este problema se puede solucionar concientizando a los vecinos para que no quemen, sino que reciclen escogiendo su basura, además de enseñarles educación ambiental.

Todo se quema: los envases y envolturas de productos, desechos orgánicos, cáscaras de verduras y frutas, llantas, pastos secos y plásticos. El humo ingresa a los hogares de cada familia de los alrededores y el olor persiste toda la noche. Los habitantes del lugar, como doña María y su familia, respiran humo de muy mal olor.

María Choque está cansada de este hecho y preocupada por el impacto que pueda tener en la salud de sus cuatro hijos. Durante el día también le afecta ver tanta basura tirada en el suelo. Los perritos abandonados deambulan por ahí y dispersan la basura en busca de comida.

Yolanda Arteaga dice que los vecinos se han quejado porque esto afecta a la urbanización, ya que las cenizas se dispersan con el viento.

Desde la junta de vecinos se ha llamado la atención de la gente para que dejen de quemar los desechos, pero por las noches aparecen fogatas y no hay cambios a pesar de las quejas.

Comerciantes, estudiantes y personas que transitan por esa avenida, a pie o en vehículos, son afectadas, pues inhalan el humo que afecta su respiración y su salud en general.

Fogata de basura contamina la zona Tarapacá, que está ubicada en el Distrito 8 de la ciudad de El Alto.

Plásticos, cartones, empaques de productos, latas y todo tipo de deshechos de las familias de la zona son quemados con frecuencia.

El fuego consume lentamente la basura y genera malos olores que contaminan el aire de la zona.

María Choque, dueña de una tienda cerca del botadero, comenta que le molesta el humo y le está perjudicando a su salud.

Los perros se juntan en los basurales en busca de comida y crean jaurías peligrosas para niñas y niños.