Por María Liz Choque Charca - Niña ecoperiodista
Al pasar por una calle que no tiene nombre en la zona Alto Chijini, Distrito 12 de la ciudad de El Alto, el olor que sale de un terreno baldío es nauseabundo. Al acercarnos, podemos ver heces fecales de personas y papel higienico usado y tirado en el lugar, también se percibe fuerte olor a orina y se ve mucha basura. Esto se repite en varios lugares del barrio donde hay terrenos amurallados, pero sin puerta.
Lo que ocurre es que en la zona hay mucha construcción y los albañiles y dueños que supervisan las obras, recurren a los terrenos vacíos cuando tienen que hacer sus necesidades. Los baños no son una prioridad en las edificaciones y los trabajadores pasan todo el día en el lugar.
La defecacion al aire libre ocurre todos los días y molesta y preocupa a las y los vecinos, no solo por los malos olores, sino por las enfermedades que pueden provocar. Valeria Mamani Fabian dice que su hija tuvo una infección estomacal y cree que la causa es la contaminación del aire con heces fecales.
En esos lotes vacíos también dejan animales muertos, como perros gatos y gallinas, y todo tipo de basura, además de escombros. A pesar de las quejas, el hábito de la defecación al aire libre continua y parecería que la gente ya lo ha normalizado.
El presidente de la junta de vecinos, Amador Canqui, está en el cargo hace cinco meses y ya ha recibido reclamos. Por ese motivo, informó que hizo el trámite en la Subalcaldía para que el camión basurero pase por la zona y para que limpien los terrenos baldíos, a fin de reducir la basura en el lugar.
Como vecina de Alto Chijini, creo que la solución es que todas las vecinas y vecinos, las y los dirigentes y dueños de los terrenos vacíos y los que están en construccion puedan organizarse para definir, por ejemplo, que se instalen baños públicos y que se haga limpieza de los lotes vacíos. Solo así será posible garantizar a las niñas y niños de ese barrio su derecho a vivir en un medio ambiente saludable.