Por Mauricio Flores Manrique

Hay mucha gente lavando su ropa en el balneario de Calerías, a pesar del fuerte viento y del frío que hace en este sector del municipio de Tomave, en el departamento de Potosí. La gente de Uyuni va hasta allá a lavar su ropa y a bañarse en las aguas calientes que luego corren directamente a alimentar un pequeño río.

Las familias lavan ropa, camas (frazadas) y peluches, y si tienen tiempo pueden poner a secar su ropa sobre un conjunto de piedras que está cerca de las lavanderías.

“Es primera vez que vengo aquí desde Uyuni, por este tiempo que está haciendo varios días mucho frío”, dice don Eladio Nina, que vive en el municipio donde está el Salar de Uyuni. La gente llega hasta el lugar en busca del agua caliente que sale de la tierra como una vertiente.

Los visitantes dicen que no llevan contaminación a Calerías, pero los envases de detergentes y jabones se desechan ahí mismo, al igual que los envoltorios de los alimentos que consumen. Lo mismo pasa con las aguas usadas: las bateas para lavar ropa están construidas para desechar el líquido por un canal abierto que va directo al río.

“Las basuras recogemos, limpiamos todo el río, no dejamos botar las basuras al río o donde sea. Esas basuras las llevamos al pozo y en el pozo las quemamos”, explica doña Norma, que es la encargada semanal de administrar el uso de las bateas y piscinas.

Las personas deben pagar cinco bolivianos por la batea para lavar ropa y, si quisieran bañarse, otros cinco bolivianos por entrar a la piscina (tres bolivianos si son niñas y niños). Doña Norma dice que a diario van a usar las lavanderías entre 10 a 15 personas, pero los sábados y domingos se llena mucho más.  

A media tarde, la gente se alista para regresar a casa en sus autos y con su ropa lavada. Aunque hace mucho frío y viento a esa hora, todavía quedan personas en la piscina dentro del agua caliente que prefieren esperar un poco más antes de irse.

1. La vertiente de aguas termales que viene de un volcán apagado, está protegida por los comunitarios de Calerias para que nadie eche basura en sus aguas.

2. Las aguas de la vertiente burbujean por su alta temperatura.

3. Existen tres canales que salen de la fosa de agua caliente, dos transportan agua hacia el balneario y otro se dirige al río, pero este se encuentra tapado para que no vaya mucha agua en esta dirección.

4. La comunidad de Calerias, ubicada a 45 minutos de Uyuni, se organizó para construir un balneario público que tiene piscinas de aguas termales y lavanderías de ropa.

5. Las personas llegan en sus autos para lavar grandes cantidades de ropa en las aguas termales.

6. El frío del lugar no detiene a las personas que quieren lavar su ropa con el agua caliente.

7. La piscina de caliente es disfrutada por las y los visitantes. El complejo también tiene lugares donde la gente puede bañarse y hacer su aseo personal.

8. El viento frío y las temperaturas bajas son normales en esta región.

9. El agua utilizada en el complejo es desechada por un caudal que llega al río cercano.

10. Por muchos años la vertiente de aguas termales alimento el caudal del rio que pasa por las comunidades de Calerias.