Por Eva Oruño Calle, 16 años, ecoperiodista del municipio El Alto
Las personas que viven en la comunidad Chojñoco, cantón Quilloma, Primera Sección de Coro Coro de la provincia Pacajes del departamento de La Paz, preservan sus humedales para que sus animales tengan pasto y agua fresca para vivir. Lo hacen desde siempre; ahí no botan basura, limpian la que llega con el viento e intentan reciclar.
Cristina tiene 48 años. Ella dice que en su comunidad todas y todos cuidan el humedal, “por eso está verde todo” y porque no botan basura y siempre recogen la que llega. Ocho personas se benefician del lugar donde toman agua y comen sus animales, como ovejas, cerdos, llamas y vacas. Eulogia tiene 35 años y hace cinco años dejó Chojñoco para irse a vivir a la ciudad de El Alto; ella critica a las personas que regresan al pueblo y llevan bolsas desechables y las tiran por la ventana contaminando el medioambiente.
Según la página Web Ramsar.org “los humedales son vitales para la supervivencia humana. Son uno de los entornos más productivos del mundo y son cunas de diversidad biológica y fuentes de agua y productividad primaria de las que innumerables especies vegetales y animales dependen para subsistir”. Proveen a la humanidad de agua dulce, recargan las aguas subterráneas y mitiga el cambio climático. Pero, “siguen disminuyendo en la mayoría de las regiones del mundo”.
Para tomar en cuenta
El uso de agua dulce es un límite planetario sobrepasado. Implica la disminución de la disponibilidad y calidad del agua dulce.
En Chojñoco existe un humedal donde los animales toman agua.
Cristina vive cerca del humedal y sus saberes ancestrales le hacen cuidar este importante reservorio de agua.
Alrededor de 30 animales entre ovejas, chanchos, vacas y llamas van consumir el agua que proporciona el humedal.
Una botella pet flota en una pequeña laguna del humedal, esto es una muestra de que algunas personas no cuidan las aguas que proporciona este lugar.
Este reservorio de agua fue construido por el alcalde y es un beneficio para la comunidad. El estanque se alimenta con las aguas del humedal.